El tratamiento con los inhibidores de cinasas, CDK, son capaces de revertir la resistencia de los tumores a esas terapias hormonales.

Cada año que pasa, los porcentajes de superación de cáncer de mama van aumentando poco a poco. Se calcula que el 70 por ciento de los nuevos casos diagnosticados expresan receptores de hormonas, lo que implica un tratamiento endocrino como la hormonoterapia. “Es muy eficaz. Sin embargo, con el paso del tiempo algunos tumores han aprendido a hacer resistencias”, comenta José Luis Alonso, jefe de Oncología Médica del Hospital Virgen de la Arrixaca (Murcia).

Se está trabajando en nuevas líneas de investigación para salvar esas resistencias basadas en CDK 4/6. “Los inhibidores de cinasas dependientes de ciclinas están ofreciendo una gran eficacia en cáncer de mama metastásico, y prolongan en gran medida la supervivencia libre de progresión. Son capaces de revertir la resistencia de los tumores a esas terapias hormonales

Se trata de una estrategia que ya está muy presente en la práctica clínica. Se están utilizando casi de forma estándar en aquellos casos de cáncer de mama aparentemente hormonosensibles con enfermedad metastásica. Ya está aceptada por las agencias reguladoras y prácticamente en ficha técnica. Con la evidencia que hay, los profesionales que se dedican a la patología mamaria saben muy bien en qué tipo de pacientes podemos utilizar estos tratamientos.

Dificultad

Ahora mismo se sabe que es eficaz en aquellas pacientes que sobreexpresan receptores hormonales y que, además, tienen el HER2 negativo. Aunque no tenemos claro que sea el tratamiento de elección para aquellas que sobreexpresan HER2, es uno de los subgrupos que se están investigando en este momento.

Según los especialistas, esta terapia añade efectividad, pero también complejidad. No suele alterar demasiado la calidad de vida del paciente pero, a veces, el tratamiento hormonal es suficiente. En grupos de pacientes con unas expectativas de vida prolongadas preferimos optar por ese tratamiento hormonal único en primera línea, dejando para un segundo tiempo los inhibidores de CDK, cuando vemos que los primeros no están funcionando.

Y es que este tipo de terapia dirigida, además de conllevar visitas constantes al hospital, tiene una serie de toxicidades muy particulares que, en opinión de los especialistas, recuerdan a la quimioterapia. Suelen aparecer neutropenias, es decir, bajadas de defensas, algo que el tratamiento hormonal no provoca. Eso sí, son toxicidades fáciles de manejar y que no comprometen demasiado la calidad de vida del paciente.

Actualmente

Lo que se está planteando ahora es adelantar ese tratamiento, emplearlo en fases más iniciales y utilizarlo como modulador del tratamiento hormonal en la fase curativa de la enfermedad. Es decir, en aquellos tumores de mama que han sido sometidos a cirugía, en los que el tratamiento hormonal tiene intención de ser curativo. En opinión de los especialistas, en casos como éstos hay mayores expectativas de curación que si se utilizan sólo los tratamientos hormonales.

Queremos descubrir si tiene sentido administrar una terapia adyuvante, pero los resultados aún son precoces. Hay varios ensayos en fase III abiertos, en los que se compara cómo están funcionando los inhibidores CDK frente al tratamiento estándar, pero aún falta tiempo para recabar resultados, ya que aún se están reclutando pacientes”, advierten los especialistas.

Líneas de investigación

Además de los ensayos que se están realizando con pacientes que sobreexpresan HER2, los especialistas apuntan que también se está probando en algunos tipos de sarcomas. “Lo más sólido que tenemos en estos momentos se está dando en liposarcomas, derivados de células grasas. Esta estrategia no tiene tanta evidencia como la que encontramos en cáncer de mama, pero sí hay datos suficientes como para empezar a explorar e, incluso, a tratar a algunos de sus pacientes”, observa.

Según su experiencia, las cinasas dependientes de ciclinas pueden estar alteradas en muchos tumores, una realidad que se ha puesto sobre la mesa investigadora. “De hecho, ahora mismo se está indagando sobre la relación que tiene este hecho con la vía HER2, con la vía CI3K en TOR e, incluso, con la vía del Ras, que también podría estar influyendo a estas CDK. De alguna forma se está explorando la posibilidad de que modulen la actividad de otros tratamientos biológicos conocidos en otras enfermedades que actúan sólo por vías moleculares”.

Fuente: Diario Medico