España se diagnostican 26.000 nuevos casos de cáncer de mama cada año y los avances han permitido desarrollar técnicas menos agresivas con la misma eficacia.

Tanto que el 70 por ciento son candidatas a someterse a este tipo de cirugías, por los que la mujer no tiene por que someterse de manera obligada a una mastectomía, según la jefe clínico Fundación Instituto Valenciano de Oncología, Julia Giménez.

Así, y si se consigue un diagnóstico precoz, la paciente puede someterse al tratamiento conservador (para cuando no hay contraindicaciones), que consiste en realizar una cirugía conservadora para quitar el tumor con un margen de seguridad, permitiendo mantener la estética de la mama y la axila, para después aplicar radioterapia, según ha explicado la doctora Giménez.

Sin embargo, la especialista ha subrayado que, en ocasiones, no se puede conservar la mama y, en este momento, sí se tendría que aplicar una mastectomía (extirpación de esta), ofreciendo a la afectada la reconstrucción posterior de manera inmediata o diferida (después del tratamiento.

“Es importante hablar con la paciente y contarle que vamos a quitar la mama, pero que se puede reconstruir, aunque advirtiéndole también de que posiblemente no quede igual, pues no se trata de una cirugía estética”, ha añadido Giménez.

Por otro lado, para aquellas mujeres que presentan un alto riesgo genético e histológico tras una biopsia previa, existe lo que se conoce como cirugía profiláctica o de reducción de riesgo, pensada para aquellas mujeres sanas con alto riesgo de padecer este tipo de cáncer. Cabe destacar que esta técnica no elimina del todo el riesgo, pues lo hace en un 90-95 por ciento, pero sí sirve como técnica de prevención para este grupo de mujeres.

“Es importante que el cirujano especialista en mama y el cirujano plástico trabajen de forma multidisciplinar para evitar el riesgo, así como conseguir un resultado estético lo más adecuado posible”, ha señalado la doctora.

De los ganglio Axilares depende el tratamiento

De cara al tratamiento correcto, es importante determinar si el tumor ha llegado o no a los ganglios axilares, pues de esto va a depender la elección de este y la posibilidad de evitar una cirugía innecesaria y, para ello, se utiliza el estudio del ganglio centinela, un importante avance en la cirugía conservadora.

Este consiste, según ha destacado la investigadora y experta en cirugía de la mama del Memorial Sloan Kettering Cancer Center en Estados Unidos, Mónica Morrow, en el “estudio del primer ganglio axilar al que se extendería el tumor de mama en su progresión al resto del organismo, lo que ayuda al comité de tumores a elegir de forma más acertada la aproximación terapéutica de cada paciente concreto, pues esta no depende de un solo especialista”.

Incluso, aunque el ganglio centinela esté afectado, no siempre es necesario quitar todos los ganglios de la axila, pues “ya hay estudios recientes que han demostrado que la presencia de células cancerígenas en uno o dos ganglios centinelas no hace necesario extirpar todos los ganglios, debido a que no se traduce en una mejora de la supervivencia y el riesgo de recaída es muy bajo”, ha añadido la doctora Morrow.

Fuente: Tribuna de salamanca